sábado, 24 de abril de 2010

El antiguo arte de la fotografía en las iglesias paceñas

Después de tomar como espacio de trabajo a las plazas de la ciudad de La Paz, también las iglesias más antiguas se han convertido de a poco en el escenario perfecto para retratar los momentos más importantes de las personas, es así que Carlos Vidal, fotógrafo de profesión, aprovecha la estética de estos lugares para innovar su trabajo; también confiesa sus motivaciones, las dificultades con las que lucha cada día y la nueva tecnología digital en cámaras.
Un saco plomo con parches en los codos, una camisa blanca, una corbata oscura y en el cuello colgada una cámara fotográfica con un lente muy grande con letras plateadas que dice NIKON son los aspectos que caracterizan a este personaje.
La profesión de la fotografía se ha iniciado en las plazas hace muchos años atrás, sin embargo, este oficio también se ejerce en las Iglesias más antiguas de la ciudad de La Paz. Carlos Vidal confiesa que cumple la labor, de aquel personaje que retrata los momentos más importantes de las personas, desde hace 33 años, trabajando tanto en la ciudad de La Paz como en el área rural.
“Una de las principales motivaciones es buscar un horizonte en la vida” comenta Carlos Vidal con relación a lo que motivó su persona para elegir esta profesión. El haber conocido a don Hugo Paz, el primer fotógrafo de la ciudad de El Alto, ha sido de gran ayuda para él, ya que admite que ha sido su gran maestro.
Carlos Vidal sostiene que el desempeño de un fotógrafo es siempre prestar el servicio a la sociedad; también admite que la gente siempre se hace sacar una “fotito” en las fiestas habituales de sábado y domingo. “Después de unos 20 o 30 minutos las fotos ya se están vendiendo a un precio módico al alcance del bolsillo”.
Debido a la falta de empleos, se ha visto que la mayoría de los espacios laborales están copados y los conflictos no faltan. “En este tiempo todo el mundo ya es fotógrafo, los fotógrafos profesionales que tenemos muchos años de experiencia tropezamos con personas que nos quitan el campo de trabajo”; “siempre hay problemas laborales que tenemos que tratar de superar como personas humanas que somos” añade Carlos Vidal.
Con la nueva tecnología en cámaras digitales es difícil adaptarse incluso al costo para los fotógrafos antiguos, cuenta Carlos Vidal, pero afirma que de todos modos los fotógrafos están tratando de adaptarse a lo nuevo que ofrece el mercado.
Con relación a la formación para ser fotógrafo Carlos Vidal comenta que para el uso de las cámaras antiguas se necesitaba instrucción, es decir, conocer los conceptos de: apertura, luz, calidad, profundidad de campo, entre otros; sin embargo afirma que con las cámaras digitales todo se facilita, “uno agarra la cámara digital y hace ya todo el trabajo”. 

Cesar Rios Nogales 

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